martes, 26 de julio de 2011

La verdad detrás del mito de Giovannita

La historia detrás del mito es un programa de Azteca 13 que se transmite los sábados por la noche. Es un programa dedicado a diversos personajes del mundo de los espectáculos y la cultura popular. Hace poco falleció la astróloga Giovannita, por ello le dedicaron una emisión (en realidad ya lo habían hecho, pero con la muerte de la astróloga rearmaron el programa).

En la mencionada emisión apareció el testimonio del crítico de televisión Álvaro Cueva.

En México no abundan los espacios televisivos dedicados al análisis de lo que la misma televisión produce, lo que abunda son los programas de chismes de espectáculos.


En Canal 22 hay un programa llamado El defensor del televidente, en éste se reflexiona sobre la TV y se da respuesta a las inquietudes de quienes ven dicho canal. Por su parte, Álvaro Cueva conduce el programa Alta definición, éste se transmite por Proyecto 40.

Y el programa no es malo, el señor Cueva está muy por encima de los “periodistas” de espectáculos de este país. En sus emisiones critica la televisión basura que se produce en Televisa y en TV Azteca (y en otras televisoras). Ha criticado los programas en los que se promueve la pseudociencia. Ha dicho que Extranormal y el programa de Jaime Maussán promocionan la ignorancia y la superstición.

Pero nada afortunada fue su participación en La historia detrás del mito. Dijo que Giovannita fue una mujer que valientemente habló de astrología en la televisión en un momento en el que se consideraba que dicha materia era una superstición. En el programa se dio la impresión de que la astrología es una ciencia. De igual forma alabó el trabajo de la astróloga. Se sumó a las afirmaciones que se hicieron acerca de lo atinada que era en sus predicciones...

Cuenta la leyenda que la señora Giovanna predijo, entre otras cosas, el asesinato del candidato del PRI a la presidencia Luis Donaldo Colosio (23 de marzo de 1994) y los atentados terroristas a las Torres Gemelas (11 de septiembre del 2001). Pero ¿realmente fue así?, ¿qué tanto éxito tenía como astróloga esta señora?


Cada año Giovanna publicaba una guía astrológica en la que aconsejaba a cada signo acerca de cuándo cortarse el cabello, cuándo sacar a pasear al perro o cuándo y a qué hora comprar un artículo electrodoméstico (no lo estoy inventando, de verdad daba este tipo de consejos), y todo lo anterior mes por mes. Vamos, al parecer nada podemos hacer –con éxito- sin consultar antes nuestro horóscopo. Pero las guías también incluían las predicciones para ese año.

No he podido revisar las guías en las que se supone que hizo las dos predicciones anteriores, pero de cualquier forma puedo decir que la señora era pésima en eso de predecir el futuro.

A finales de 1997, durante un debate de los que organizaba Nino Canún y en el que participaron Mario Méndez Acosta y Mauricio-José Schwarz, Giovanna predijo que el Papa Juan Pablo II moriría al año siguiente (de causas naturales) y que el mundial de futbol Francia 98 lo ganaría Brasil (lo ganó Francia). En ese mismo programa, también predijo que en el 2004 el presidente de los Estados Unidos sería asesinado (tal vez pensó que si nada pasaba lo olvidaríamos, al fin que faltaban varios años).

Curiosamente los otros astrólogos –entre los que estaba Esteban Mayo, otro de los peces gordos de la astrología mexicana- estuvieron de acuerdo en eso de que fallecería Juan Pablo II (como sabemos falleció hasta el 2005), bueno, sólo uno se mostró en desacuerdo pero no recuerdo su nombre. Y nadie menciona esta predicción fallida.

En aquel programa, Esteban Mayo dijo haber reconocido la voz de Mauricio-José como el conductor del programa de radio Muy Interesante, entonces el charlatán dijo que lo admiraba y que le gustaba mucho el programa de radio. No sé si con ese comentario estaba tratando de ganarse a los escépticos, pero si tal era el caso, no lo logró. Ya enojado Mayo dijo: “Se les llena la boca diciéndonos charlatanes.” A lo que Mauricio-José contesto: “Tú lo estás diciendo.” Canún les había pedido a los miembros de la SOMIE que no llamaran charlatanes a los otros invitados.

Por aquellos años Giovanna decía que "una cortina de fotones se acerca a la Tierra", ¿y cuáles serían las consecuencias? Como dicha cortina se interpondría entre el Sol y nuestro planeta, pasaríamos varios días de oscuridad. De hecho, varias personas hablaron al programa Muy interesante para preguntar sobre los delirios de la astróloga.

¿Y quién ganaría el mundial Alemania 2006 según la astróloga? Francia. La copa fue para Italia. Las predicciones de la señora sobre ese mundial pueden verse aquí y aquí.

El creyente en la astrología podría decirme: “Bueno, nadie ha dicho que Giovanna acertaba todas las predicciones que hacía.” Bien, pero ningún astrólogo dice cuál es su porcentaje de aciertos. ¿Con cuántos aciertos consideraría el lector que un astrólogo, vidente o profeta realmente tiene el poder, don o conocimiento para ver el futuro? Pero conocer las fallas también es importante. Si no podemos cuantificar los aciertos y los errores, ¿cómo podríamos ponerlos a prueba?

Pues a continuación voy a presentar la prueba de que Giovanna no daba una como astróloga. A finales del 2005 compré esta revista:



No hace falta más que dar un vistazo a las terribles, escalofriantes, alarmantes, sensacionalistas y sangrientas predicciones lanzadas por la astróloga para el 2006 para ver la verdad detrás del mito de Giovannita.


Aquí más sobre los fallos de la señora.

Son montones las predicciones fallidas de Giovanna. La señora reciclaba cada año las predicciones que hacía (y hay quines lo hacen a cada rato).




Conclusión 1. El método que usaba se hace evidente: lanzar cientos de terribles predicciones y si por “chiripa” le atinaba a alguna, entonces la contaba entre sus éxitos y le hacía toda la publicidad posible. Vea el lector cuántas predicciones (fallidas) se refieren a la destrucción de edificios o monumentos, y cuántas a muertes o accidentes de personajes diversos.

Conclusión 2. Eso de que Giovannita predijo el asesinato de Luis Donaldo Colosio y la caída de las Torres Gemelas es sólo un cuento.

sábado, 9 de julio de 2011

La filosofía de Bertrand Russell

Ramón Xirau afirma que la obra de Bertrand Russell puede dividirse en cuatro:

1. Obras lógicas: Los principios del conocimiento y Principia mathematica (ésta última en colaboración con Alfred North Whitehead).
2. Obras filosóficas: El conocimiento humano, su alcance y sus límites; Análisis de la materia; Análisis de la conciencia; La filosofía de Leibniz; Investigación acerca del significado y de la verdad y Mi desarrollo filosófico.
3. Ensayos: El impacto de la ciencia en la sociedad, Autoridad e individuo, Mística y lógica y El concepto de la felicidad.
4. Obras de divulgación: El A.B.C. de la relatividad e Historia de la filosofía occidental.

Xirau explica que la lógica matemática o simbólica nació cuando los filósofos y matemáticos se ocuparon del surgimiento de geometrías no euclidianas internamente consistentes pero contradictorias entre sí. Ésta fue fundada por George Boole, y sus continuadores fueron Ernst Schröder, Giuseppe Peano y Gottlob Frege, quien influyó de manera decisiva en Russell y Whitehead.

Russell y Whitehead, en su libro Principia mathematica, intentan establecer el fundamento lógico del lenguaje matemático.

Xirau explica: “Russell renuncia a la metafísica tradicional. No cree que pueda probarse nada acerca de la existencia de Dios, del alma o del universo como sustancia. No renuncia a la metafísica en cuanto piensa que existe y debe existir una concepción del mundo.”

Foto de Iván Galíndez


El fundamento lógico de la aritmética

¿De qué problemas se ocupaban Gottlob Frege (1848-1925) y Bertrand Russell (1872-1970)? Los dos filósofos se ocuparon de la filosofía del lenguaje y de la filosofía de las matemáticas. Ambos se planteaban el problema de la igualdad (al que me referiré más adelante). De igual forma, ambos trabajaron en lo que se conoce como “el proyecto logicista”: fundamentar las matemáticas en la lógica. Para Frege, las verdades de la aritmética (más no las de la geometría) podían deducirse de la lógica. Al ocuparse de este proyecto, Frege –en su Conceptografía de 1879- introdujo una notación (“para todo”, “para al menos un”) que permitió la cuantificación de una gran cantidad de argumentos. Posteriormente Russell y Alfred North Whithead usaron una notación menos extensa en sus Principia Mathematica (1910-1913).

El sistema lógico de Frege daba lugar a una paradoja, ésta se la hizo notar Russell. Se trata de la siguiente pregunta: ¿Se contiene a sí mismo como elemento el conjunto de todos los conjuntos que no se contienen a sí mismos como elementos?
De ahí que Frege introdujera cambios en sus Leyes básicas de la aritmética (1902) pero abandonó su proyecto. Russell continuó trabajando en éste.


Tres temas importantes dentro de la Filosofía de las matemáticas

En 1928, durante un congreso de matemáticas, David Hilbert, preocupado por el tema del fundamento de las matemáticas, planteó que debían abordarse las siguientes tres preguntas:

a) ¿Son completas? Es decir, ¿puede probarse o refutarse cualquier enunciado matemático?
b) ¿Son consistentes? Planteado de otra forma: ¿puede probarse que un enunciado matemático falso no puede derivarse de una secuencia de pasos válidos?
c) ¿Son decidibles? Es decir, ¿existe un método definido, aplicable en principio a cualquier enunciado, que permita llegar a la decisión de si el enunciado en cuestión es verdadero?

En 1931 apareció el texto Sobre las proposiciones formalmente indecibles de los Principia Mathematica y sistemas conexos. Se trataba de la respuesta de Kurt Gödel al programa planteado por Hilbert.

Gödel mostraba que no puede probarse la consistencia de las matemáticas, y que si se asumen consistentes no puede probarse que sean completas.

Sobre el primer punto, Ernest Nagel y James R. Newman, en su libro sobre el teorema de Gödel, escriben: “(Gödel) demostró que es imposible presentar una prueba matemática de la consistencia de un sistema lo bastante comprensivo como para abarcar toda la aritmética, a menos que se empleen en la prueba reglas de deducción que difieran en ciertos aspectos esenciales de las reglas de transformación utilizadas para derivar teoremas dentro del sistema. Indudablemente, una prueba así posee un gran valor e importancia. Sin embargo, si el razonamiento se basa en reglas de deducción mucho más potentes que las reglas del cálculo aritmético, de tal modo que la consistencia de las hipótesis contenidas en el razonamiento esté tan sujeta a la duda como lo está la consistencia de la aritmética, la prueba no producirá sino un especioso triunfo; sería matar un dragón solamente para crear otro.”

Sobre el segundo punto dicen: “Gödel demostró que los Principia, o cualquier otro sistema dentro del cual pueda desarrollarse la aritmética, es esencialmente incompleto. En otras palabras: dado cualquier conjunto consistente de axiomas aritméticos, existen proposiciones aritméticas verdaderas que no pueden ser derivadas de dicho conjunto.” Después de exponer la forma en que Gódel trabajó, afirman: “debemos concluir que si la aritmética es consistente, su consistencia no puede ser demostrada por ningún razonamiento metamatemático susceptible de ser representado dentro del formalismo de la aritmética.”

El trabajo de Gödel terminó con el proyecto logicista.

Gödel no afirmaba nada acerca del tercer problema, el de si las matemáticas son decidibles. Cabía la posibilidad de que existiera un método para distinguir entre las proposiciones que se pueden probar y las que no. De este tema se ocupó Alan Turing (1912-1954). La respuesta que dio fue negativa. El posible método para responder a la decibilidad no se centraba en enunciados o proposiciones sino en el cómputo de números, es decir, se trataba de un problema equivalente. Entonces planteó lo que se conoce como Máquinas de Turing


El problema de la igualdad

Frege se preguntó acerca de la manera en que debemos entender la identidad. ¿Es una relación?, ¿de qué tipo?, y más importante, ¿entre qué: entre objetos, entre signos?

¿Es lo mismo 'a=a' que 'a=b'?

a=a es a priori y necesaria porque todo objeto es igual a sí mismo. Si 'a=b' es verdadera perecería ser trivial (si se refiriera a objetos), pues estaríamos diciendo lo mismo que 'a=a'. Pero los libros de matemáticas y de física están llenos de ecuaciones, así, podemos pensar que 'a=b' no es trivial.

La primera respuesta al enigma de la identidad que diera Frege corresponde a su semántica del contenido conceptual. Tienen contenido conceptual los nombres (y éste es el objeto que denotan), los enunciados y tal vez los términos conceptuales.

El contenido conceptual es la información contenida en los mencionados términos. El contenido conceptual de un nombre es el objeto que denota. Dos enunciados lógicamente equivalentes comparten contenido conceptual. Esto es: sean A, B, C y D enunciados. Si A y C implican D, y B y C implican D, entonces A y B tienen el mismo contenido conceptual.

Frege afirmó en su semántica del contenido conceptual que una ecuación es una relación no entre objetos del mundo sino entre signos.

De forma que una ecuación deba interpretarse de la siguiente manera: El término que está a la derecha del signo de igualdad y el término que está a la izquierda se refieren al mismo objeto. Por ejemplo, 'perro=dog' se debe entender como la palabra 'perro' y la palabra 'dog' se refieren al mismo animal.

Posteriormente Frege introduce los conceptos de referencia y sentido.

¿Por qué modifica su anterior semántica? Entre otras cosas porque esta viola el principio de composicionalidad.

Este concepto se refiere a lo siguiente: podemos entender el sentido de enunciados nunca antes escuchados porque entendemos el sentido de las expresiones que contiene o que lo forman.

El principio de composicionalidad dice que si un enunciado tiene un cierto sentido y sustituimos una de sus expresiones por otra con la misma referencia, entonces el sentido del enunciado se conserva. Pero hay ejemplos en los que no sucede esto. Para resolver este problema Frege introdujo los conceptos mencionados.

La referencia de un nombre es el objeto que denota. ¿Tiene referencia un enunciado? Frege pensó que sí. ¿Cuál sería éste?

Cuando nos interesa el sentido de un enunciado nos fijamos en el sentido de las expresiones que lo componen. Cuando nos interesamos en la referencia de los nombres, por ejemplo, pensamos en su valor de verdad. De igual forma, los enunciados con expresiones sin referencia no tienen valor de verdad. Esto le indicó el camino a Frege para plantear que:

La referencia de un enunciado no es el pensamiento que expresa, pues al cambiar un nombre con la misma referencia, el pensamiento del enunciado cambia, pero no su valor de verdad. Así, la referencia de un enunciado es su valor de verdad.

Ya con su nueva semántica, Frege dice que 'a=b' no es trivial cuando es verdadero porque aunque 'a' y 'b' tienen la misma referencia, tienen distinto sentido.

Russell hace algunas críticas a las ideas de Frege (sobre la referencia y el sentido), propone su propia teoría y con ella resuelve problemas tratados por el mismo Frege (lo anterior en “On denoting”).

Russell plantea que las expresiones denotativas nada significan por sí mismas, pero contribuyen al significado de los enunciados en los que aparecen. Así, la expresión “un hombre” nada significa por sí misma, pero el enunciado “ayer le pegué a un hombre” sí tiene significado.

El filósofo plantea la paráfrasis para las expresiones denotativas. Y esta misma paráfrasis la usa para explicar su idea de las descripciones definidas.

La paráfrasis consiste en traducir el lenguaje ordinario al lenguaje formal (o lógico). Para Russell la ecuación (la identidad) no es trivial cuando es verdadera porque no se refiere a la relación de un objeto consigo mismo, sino a una descripción definida.

Entonces la ecuación a=b puede verse como a=cierta descripción definida.

Los nombres pueden contener “escondida” una descripción definida. Ejemplo: Platón=autor de Cármides. Y la paráfrasis comenzaría así: Existe uno y sólo un autor del texto Cármides, y ese es Platón. Aunque todavía esta frase pueda formalizarse.


Nota: En la galería de la UAM Iztapalapa se está exhibiendo actualmente el trabajo fotográfico de Iván Galíndez (alumno de la carrera de Filosofía). La exposición se titula Piel de la Tierra. “Ilógica bendita de la desnudez” es el título de la fotografía que acompaña esta entrada. Galíndez tuvo el buen tino de usar para la foto periódico con un artículo y una imagen de Bertrand Russell. Cuando la vi pensé que estaría perfecta para ilustrar un texto sobre este filósofo. Por ello me “improvisé” esta entrada (mezcla de algunas cosas que he escrito sobre Russell, la filosofía del lenguaje y de las matemáticas). Entonces lo importante de esta entrada es la imagen, no el texto. Así –para ser exacto- me debo referir no a la foto que acompaña al texto sino al texto que acompaña a la imagen.

jueves, 7 de julio de 2011

¿Fue Peyo asesinado por un pitufo?

Hace como cuatro años, en una visita a la biblioteca del Colegio de México, encontré en la librería un texto en el que se analizaba desde las ciencias sociales el rumor aquel de que los muñecos de los pitufos cobraban vida durante la noche y se dedicaban a matar gente. Sí, eso se decía en la década de los ochenta. En la primaria a la que iba mis amigos y compañeros daban testimonio de la veracidad de esas historias, abundaban los niños con algún pariente, vecino o conocido que había muerto a manos de alguno de los tiernos pitufos. Bueno, mi mamá me compró a "pitufo bromista", a "vanidoso", a "papá pitufo" y -si no mal recuerdo- a "pitufina" y juro que nunca tuve que enfrentarme a muerte con alguno de ellos. La verdad no me creí esos cuentos; tuve manteles con la imagen de los pitufos, un disco con sus canciones... Robotín me causaba mucha ternura.



Cuando vi el libro en el que se analizaba el rumor de los pitufos asesinos pensé que el tema no valía la pena, pero he cambiado de opinión. Me gustaría leer ese trabajo.



Así que me puse a buscar en internet y encontré que la autora es Margarita Zires, profesora investigadora en la Carrera de Comunicación Social de la UAM Xochimilco. Aquí dice que también ha hecho estudios sobre la Virgen de Guadalupe: "La Guadalupana cruzando las fronteras y atravesando el milenio", "Los mitos de la Virgen de Guadalupe, su proceso de construcción y reinterpretación en el México pasado y contemporáneo", "Caminos y transformaciones actuales de la Guadalupana al sur y norte del Río Bravo" y "La visión feminista chicana sobre la Guadalupana".

El trabajo de la doctora Zires se titula: Un acceso a las culturas orales: El rumor de los pitufos. En el libro aparecen los testimonios recogidos por la investigadora. También recuerdo que la autora especulaba acerca de las razones por las que aquellos niños contaban esas historia.

El rumor de los pitufos me recuerda el rumor del chupacabras, y ambos merecen un estudio desde las ciencias sociales (si en los ochentas hubiera existido el programa Tercer Milenio, el charlatán Jaime Maussán habría dado todo por cierto, seguramente hubiera dicho: "¿por qué los niños mentirían?, ellos siempre dicen la verdad, ¿por qué desestimar el valor de sus testimonios?").

Daniel Galarza Santiago, mejor conocido como el escéptico de Jalisco, escribe en su blog sobre la investigación de Benjamin Radford (del CSI): ¿Cómo dice que era el chupacabras?

Un extracto del trabajo de Margarita Zires puede encontrarse aquí.

Si cuando usted era niño supo de algúna persona atacada, torturada, violada o asesinada por un pitufo, o si usted mismo sobrevivió a un pitufi-ataque, no dude en dejar su testimonio.